Sinceramente, creo que sorprende, aparte de por su estética blanca por fuera y roja intensa por dentro también destaca su sabor. No te lo imaginas hasta que lo pruebas.
De hecho, a mi me pasó: "Será un bizcocho de vainilla normal pero rojo"- pensé.
Pero NOOOO!!
Es mucho más que color, es jugosidad, ese sabor característico...
En definitiva...Un postre diferente y que se ha ganado a pulso ser un uno de los pasteles favoritos de mis invitados.
Además no es muy difícil de hacer. Si os van las tartas probablemente ya la habréis hecho. Y si no deberíais hacerla. De verdad.
Dificultad: Fácil-Media
Tiempo: 45-50 minutos + 25-30 minutos horneado
Ingredientes:
Receta de Alma Obregón
Para tres moldes redondos de 15 cm
- 120 ml de aceite suave
- 320 g de azúcar
- 2 huevos
- 2 cucharadas rasas de cacao puro sin azúcar VALOR
- 1 cucharadita de colorante rojo en pasta. Yo usé Sugarflair Red Extra
- 3 cucharaditas de vainilla en pasta
- 250 ml de leche
- 2 cucharadas de zumo de limón
- 300 g de harina de trigo
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 2 cucharaditas de vinagre blanco. Yo usé vinagre de manzana.
Crema de queso:
- 500 g de icing sugar o azúcar glass
- 225 g de queso de untar frío tipo Philadelphia NO LIGHT
- 115 g de mantequilla SIN SAL a temperatura ambiente
Elaboración:
- Comenzamos precalentando el horno a 180ºC sin ventilador.
- Ponemos la leche y el zumo de limón en un vaso y dejamos reposar unos 10 minutos. La leche se "cortará" y tendremos un buttermilk casero.
- En un bol aparte tamizamos la harina, el cacao y la sal. Reservamos.
- Con la pala K de la batidora o con unas varillas eléctricas (también se puede hacer a mano) batimos los huevos, el azúcar y el aceite. Bajamos la velocidad al mínimo e incorporamos los ingredientes secos previamente tamizados.
- En otro vasito mezclamos el bicarbonato sódico con el vinagre blanco y en cuando burbujee y se active lo agregamos a la masa. Volvemos a batir.
- Por último añadimos la vainilla en pasta y el colorante rojo en pasta. Seguimos batiendo a mínima velocidad hasta obtener una mezcla homogénea.
- Repartimos la masa entre nuestros moldes previamente engrasados y enharinados y los horneamos durante 25-30 minutos o hasta que al pincharlos con un palillo este salga limpio.
- Pasado este tiempo sacamos del horno y dejamos enfriar unos 10-15 minutos sobre el propio molde y después, una vez templados, desmoldamos y dejamos enfriar por completo en una rejilla.
- Mientras tanto hacemos nuestra crema de queso. Para ello batimos el icing sugar con la mantequilla a velocidad máxima durante 4-5 minutos hasta que estén muy bien integrados. En ese momento añadimos el queso de untar frío y bajamos la velocidad. Batimos lo mínimo. Si batimos demasiado este crema perderá consistencia.
- Igualamos todos los bizcochos con una lira o cuchillo de sierra de modo que todos tengan el mismo grosor (¡No os comáis lo que sobre para luego poder decorarla con las migas!). Rellenamos con una capa de crema cada piso de bizcocho y cubrimos toda la tarta con una finita capa de crema que hará de "sujetamigas". Metemos en la nevera durante 30 minutos y luego terminamos de cubrir con más crema hasta dejarla completamente lisa.Yo hice unas pequeñas decoraciones con una boquilla de estrella abierta mediana alrededor de la tarta.
- También podemos decorarla con las migas que nos sobraron al igualar los bizcochos.
Espero que la hagáis para Navidad o para San Valentín...o mañana. O pasado. O un puente. Pero por favor hacedla algún día.
Yo ya me despido que mañana tengo colegio. Si, el verano pasa muy rápido. Es una lástima...
De todos modos intentaré sacar tiempo de algún lado para cocinar y poder mostraros más y más recetas.
!Hasta pronto! Espero...Un abrazo a todos!
José Luis Cerezo
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